Con la presencia de numerosos fieles en la tarde del sábado 11 de enero se celebró la apertura del santuario de Nuestra Señora de las Mercedes de Limávida, como templo jubilar.
Varios peregrinos llegaron hasta este santuario mariano, para participar de la eucaristía en un grato ambiente de devoción jubilar, con gestos penitenciales. La misa fue presidida por el rector del santuario, padre Hernán Vergara Jara, acompañado por todos los Ministros y Ministras Enviados de las parroquias Hualañé y La Huerta del Mataquito, junto a otros de Curicó.
“En el contexto del bautismo de Jesús estamos abriendo este templo jubilar, con ocasión de este año de gracia al que nos convoca la Iglesia. Este santuario de la Virgen de las Mercedes de Limávida será un espacio de peregrinación personal, familiar y comunitaria. Nos acercamos a este templo para nutrirnos de la fuente inagotable de Dios. La peregrinación es un signo claro de la comunidad en la Iglesia”, dijo el padre Hernán.
Y agregó: “Cada 25 años celebramos jubileos con acciones solidarias y de misericordia. Dice la enseñanza de la Iglesia que cuando peregrinamos en este tiempo jubilar podemos recibir el regalo de la indulgencia plenaria (…) el tiempo jubilar es hacer fiesta y esta fiesta se hará durante todo este año. Cuántas parroquias, cuántas comunidades, cuántas personas irán a peregrinar buscando una sola cosa: la misericordia de Dios”.
“Al abrir el santuario de Limávida, este va a quedar siempre a disposición no solo para nosotros, sino para esas cientos y miles de personas que van a peregrinar en este año de jubileo como nos pide el Papa. Invitamos a todos los catequistas, papás y mamás, jóvenes, ministros de nuestra Zona Costa y de todos lugares a acudir a este templo a peregrinar”, aseveró el sacerdote.
Tras la comunión se hizo un bello gesto junto a la pila bautismal para todos los presentes, pero fundamentalmente para las personas enfermas, en donde cada uno pasaba al frente diciendo quiero sanar y el padre Hernán les hacía la señal de la cruz en la frente con la estola.
Al finalizar el encuentro, la Pastoral del Santuario regaló helados, un calendario Jubilar y el compartir de una once fraterna. Además, hay que destacar la llegada de peregrinos venidos de Molina, Curicó, Valparaíso y San Fernando, y los habituales de la Zona Costa.
