La Catedral de la capital maulina acogió este martes 01 de octubre, desde las 12:00 horas a decenas de personas que se acercaron a celebrar la Misa por el Día Internacional del Adulto Mayor, donde se honra esa sabiduría que otorgan los años.
El Administrador Apostólico de la Diócesis de Talca, el padre Galo Fernández Villaseca presidió esta Eucaristía, junto al padre Luis Alarcón Escárate, Vicario de Pastoral Social. En su homilía, el obispo agradeció la presencia de todos y de los grupos de adultos mayores de la diócesis por ser parte de este bonito encuentro y aseveró además que “los años nos van dando sabiduría, y en qué consiste la sabiduría, en conocer el sentido de las cosas, de la vida”.
Por esta razón, celebra a los adultos mayores de nuestra diócesis que comparten su sabiduría y guían a los más jóvenes hacia un camino de encuentro con el Señor, con lo que verdaderamente importa.
“Cuando estamos muy jóvenes nos afanamos, corremos por cosas a veces materiales, por éxitos mundanos. El tiempo le va enseñando a uno que hay tantas cosas que en realidad no valen nada, y que en realidad lo importante, lo definitivo es la vida que Dios nos regala, tener la comida adecuada, las relaciones personales, el cariño, tener el abrigo, tener la amistad, tener las cosas sencillas de la vida, con los años se va aprendiendo eso”, agregó el Administrador Apostólico.
Aprovechar la sabiduría de los mayores
A su vez, aseguró que también con los años se va aprendiendo a tener conciencia de que vamos en el camino de encontrarnos con el Señor: “Y se tiene esa conciencia sin ningún espanto, porque se tiene la sabiduría necesaria para tener la mirada puesta en Dios, en su camino definitivo”.
Para finalizar sus palabras, el obispo invitó a los adultos mayores a celebrar esta hermosa etapa de la vida, que a veces es poco valorada en nuestra sociedad y en el mundo. “Tal vez en eso nos falta mucho en aprender en nuestra sociedad, no solo a permitir que vivan bien los adultos mayores, sino a aprovechar la sabiduría, la riqueza, no se dejen achacar ustedes por la torpeza de los que nos creemos más jóvenes (…) atrévanse, ustedes tienen tanto que decir”.
Tanto en el ofertorio como en las plegarias, participaron adultos mayores de las distintas parroquias de la diócesis, y oraron por aquellos que ya no están. Y ya casi al finalizar la Eucaristía se realizó también la oración por la lluvia.
La celebración por este día culminó con la despedida por parte del Administrador Apostólico, el padre Galo Fernández y el padre Luis Alarcón, en las puertas del templo catedral.