Con gran esperanza el padre Nelson Chávez Díaz fue recibido en la parroquia Espíritu Santo de Talca, en una celebración eucarística realizada en la tarde del sábado 15 de marzo.
Numerosas personas de las diferentes comunidades que conforman esta parroquia, además de un buen número que llegó desde la parroquia San Juan Bautista de Curicó, participaron de la misa de toma de posesión que fue presidida por el Obispo de Talca, Mons. Galo Fernández, y concelebrada por varios sacerdotes en la compañía de diáconos y ministros enviados.
En la ocasión se dio lectura del decreto de nombramiento del nuevo párroco y el padre Nelson hizo su profesión de fe. El evangelio de la transfiguración del Señor marcó la celebración.
Al iniciar su homilía el padre Galo mencionó que “el cambio de párroco en una comunidad es un momento muy importante que nos toca el corazón, porque eso revela que el sacerdote no es solo el jefe o el administrador, sino un padre y un pastor”.
“Estamos con sentimientos encontrados, desde Curicó han venido a dejar al padre Nelson para decirle a la comunidad del Espíritu Santo que este sacerdote es buena gente. Y también la gente de acá con cariño despide al padre Pedro Castillo, a quien le pedí que se hiciera cargo de la parroquia Inm. Concepción cuando murió el padre Carlos Serrano. Agradecerle al padre Pedro que ha sabido sobrellevar una carga pastoral muy grande”, dijo el obispo.
Los cambios le hacen bien tanto al sacerdote como a la comunidad destacó el padre Galo: “Los curas no son iguales, son distintos, y eso es parte de la riqueza que tenemos”.
El evangelio indica que Jesús sube a la montaña porque necesitaba orar, “y el Señor necesita que lo acompañen. Y la presencia de Moisés y Elías en la montaña es muestra de la gloria, pero también lo preparaban para el sacrificio en Jerusalén. El camino de la cuaresma nos quiere fortalecer en la prueba porque la vida cristiana está poblada de cruces, la vida del pastor tiene que ser una vida de seguimiento a Jesús en este camino de entregar la vida. Gracias, padre Pedro y padre Nelson por estar aquí en medio del pueblo para ofrecer la vida sirviendo al evangelio de Jesús”.
Pastor junto a la comunidad
Seguidamente, el padre Nelson Chávez renovó sus promesas sacerdotales, besó el altar, recibió las Sagradas Escrituras, los vasos sagrados y el obispo lo invitó a sentarse en el sitial, tomando posesión así de la parroquia Espíritu Santo, momento que se selló con un fuerte aplauso de los presentes. Tras esto se firmó el acta correspondiente.
Luego de la consagración y antes de la comunión le fueron entregadas las llaves del tabernáculo al nuevo párroco, quien más tarde agradeció el cariño de la gente: “El párroco también tiene como misión llevar a otros al encuentro del Señor. Esa es la experiencia fundante en nuestra vida cristiana, encontrarse con el Señor para estar con él, para amarlo, para seguirlo, para convertirse en discípulo misionero”.
“En Evangelii gaudium el Papa Francisco dice que el pastor tiene que ir adelante abriendo camino, sosteniendo la esperanza. A veces también va acompañando en medio de la comunidad, acompañando en la vida cotidiana, compartiendo la vida de la fe, la vida familiar, la vida pastoral. Y otras veces también el pastor tiene que ir atrás acompañando a los rezagados, a los desalentados, aquellos que a veces están pasando por periodos de tribulación o de crisis. Creo que también hoy día el Señor me llama y nos llama a todos a dejarnos acompañar por él”, terminó diciendo el nuevo párroco de Espíritu Santo quien además es Vicario General de nuestra diócesis desde marzo de 2020.
La misa concluyó con la bendición del obispo y el cariñoso saludo de la comunidad al padre Nelson Chávez.