El domingo 03 de agosto, la Unidad Pastoral de Sarmiento celebró la misa de envío de su nueva ministra, Verónica Cofré Pérez. La celebración fue a las 10:30 horas en la capilla Santa Cruz.
Ella es oriunda de Sarmiento, tiene 64 años, y participa en esta Unidad Pastoral desde que tiene 16 años, por medio de la catequesis en la comunidad San Alberto Hurtado. Está casada hace 43 años con Sergio Bravo Ponce, tienen dos hijos y una nieta. Junto a su esposo han participado como catequistas y también es ministra de la comunión.
En 2023 recibió la invitación por parte del Diácono Fernando González para ser parte de la formación que la prepararía para este servicio de ministra enviada, decisión que conversó mucho junto a su esposo.
“Hablé con mi esposo, en ese entonces mi esposo estaba enfermo, tenía un problema en un riñón, un tumor cancerígeno. Y estaba con todo ese proceso de operarse. Entonces yo lo dejé pasar, hablé con el diácono y me dijo, ‘Esperemos un tiempo’. Y al año siguiente el diácono me volvió a invitar y lo volví a hablar con mi esposo. Ya a mi esposo lo habían operado, se estaba recuperando y él me dijo; ‘Sí, vamos yo la apoyo, usted sabe que yo estoy con usted en todo lo que usted emprenda yo voy a estar. Y si eso a usted la hace feliz, vamos’”.
Verónica Cofré aunque confiesa empezó todo este proceso formativo para ser ministra con mucho miedo, agradece a Dios por la fortaleza que le brinda cada día y espera realizar un buen servicio a su comunidad.
“Yo siempre me levanto en la mañana y le digo ‘Señor, que se haga tu voluntad, aquí estoy para hacer tu voluntad’, eso me ha ayudado bastante también a tener la fortaleza y y seguir adelante. Me siento con muchos nervios, pero también muy confiada en el Señor porque Él sabe lo que quiere para uno. Y si Él me llamó a este servicio, yo creo que Él va a estar ahí siempre apoyándome y tirándome para arriba”.
De igual forma, la ministra agradece el apoyo de su familia y también de su comunidad, que están muy alegres de tener una mujer ministra: “Yo he recibido mucho amor, mucho cariño de mi comunidad. Somos poquitos, somos una comunidad chiquitita, pero ellos siempre han estado conmigo y siento mucho cariño de parte de ellos. Yo también les quiero retribuir eso, estar ahí apoyándolos en la evangelización”.
La misa de envío fue presidida por el obispo de la Diócesis de Talca, monseñor Galo Fernández.