Ivonne Benavides y Neda Ramírez fueron enviadas ministras en una celebración eucarística presidida por el obispo Galo Fernández, durante la tarde del sábado 6 de septiembre.
Muchos fieles de la comunidad, junto a familiares y amigos de las nuevas ministras llegaron al templo parroquial de Villa Prat para celebrar este gran momento. El padre Sergio Díaz, párroco de Villa Prat, presentó al obispo a las futuras ministras enviadas.
“Acogemos con gratitud a Neda e Ivonne por este paso más que dan en el camino de servicio a la comunidad”, comenzó diciendo el obispo.
“Amar el camino de Jesús es arriesgarlo todo. Seguir a Jesús es un camino de donación de sí mismo. Este paso que dan es un paso de aceptar y estar disponibles para el servicio de la gente y de la Iglesia. Si alguno no ama las cosas de Dios lo suficiente no puede seguir este camino. Por eso le agradecemos a ambas por su disponibilidad que ya han ido marcando como ministras de la comunión, en el servicio de la catequesis y en distintos servicios”.
“¿En qué consiste este camino de ministra enviada? Es una forma de remarcar la riqueza de toda persona en el camino de la Iglesia. Un defecto que hemos tenido como Iglesia católica es un concentrar de modo excesivo todas las funciones en la persona del sacerdote. Este ministerio quiere más bien multiplicar el rol del liderazgo en personas laicas que acompañen la vida de la comunidad, que nos alienta a todos en el camino de la oración”, aseveró el obispo de Talca.
La liturgia es importante, “pero lo fundamental del ministerio enviado es acompañar a la comunidad, organizarla. Su nombre de ministro enviado implica salir, visitar familias, acompañar a los enfermos, llevar la Palabra de Dios a quienes más lo necesitan”, dijo el padre Galo.
A continuación, se hizo el envío e Ivonne y Neda expresaron su disponibilidad para este servicio. El obispo hizo entrega de las albas, las que fueron puestas por sus familiares. Luego de la comunión, las nuevas ministras recibieron el porta viático para llevar a Jesús sacramentado.
Neda Ramírez Porras agradeció la presencia de todos, en especial de su mamá y hermanos: “Necesito la ayuda de ustedes porque no es fácil. Radicalmente uno tiene que hacer muchos cambios también para agradar más al Señor y ser coherente con lo que uno piensa y con lo que uno va a hacer”.
Asimismo, Ivonne Benavides Retamal, expresó que estaban ahí para hacer la voluntad de Dios: “Somos las primeras mujeres ministras enviadas de Villa Prat. Tengo la plena confianza que vamos a ser capaces de cumplir la misión como el Señor quiere. Mi corazón tiene mucha emoción. Con el apoyo de nuestras familias y la comunidad vamos a salir adelante”.
Tras culminar la misa se realizó un grato compartir en el salón parroquial.