En una ceremonia efectuada el viernes 25 de noviembre, en el patio del establecimiento educacional, se bendijo el Colegio Monseñor Manuel Larraín de Talca con la participación de toda su comunidad educativa.
Durante el acto la directora del colegio, Gladys Pacheco, hizo referencia al origen histórico del establecimiento dejando en claro que éste se remonta a las inquietudes de monseñor Manuel Larraín Errázuriz, obispo de Talca, quien en la década del ’50 contacta a los Hermanos de la Inmaculada Concepción, quienes se instalaron en el lado oriente de la ciudad.
“Tres años más tarde se inaugura el Liceo Pío X, el cual en 1970 se fusiona con el Seminario San Pelayo y el Instituto Santa Cruz, dando vida al Colegio Integrado San Pío X (…) en marzo de 1986 los Hermanos de la Inmaculada Concepción dan origen a un nuevo referente educacional, el Colegio Manuel Larraín”, dijo la directora.
Tras el terremoto de 2010 se instalan en primer término en el Colegio San Antonio, luego en el recinto de la UC del Maule y en el CIT Central. “El año 2013 comienza una nueva etapa en este edificio. Hoy se bendice esta nueva infraestructura, pero principalmente a quienes trabajan y estudian aquí, para que sepamos enfrentar con sabiduría y amor las necesidades de cada día”, mencionó Gladys Pacheco.
También hizo uso de la palabra la apoderada Julia Leiva, quien agradeció el haber llegado este momento. Asimismo, Rocío Castillo, presidenta del Centro de Alumnos del Colegio, destacó que ser parte del centro educacional es sinónimo de “trabajo en comunidad, ambiente fraternal y un lugar donde podemos crecer rodeados de los mismos valores que se nos inculcan en nuestros hogares”.
En tanto, monseñor Horacio Valenzuela Abarca, obispo de Talca, dio gracias por esta comunidad que ha ido madurando después de las tragedias.
“El Señor nos ha concedido este lindo edificio, pero más allá de eso una buena comunidad de profesores, auxiliares, papás, mamás y directivos que nos ha ido posicionando como un colegio de excelencia; eso es un regalo muy grande Dios porque es algo que no ha costado poco”, mencionó el pastor diocesano.
Posteriormente, el obispo bendijo el Colegio Mons. Manuel Larraín siendo un momento de mucha emoción para quienes forman parte de esta importante entidad educativa.